Hay una serie de mitos que siempre han girado en torno a la alopecia androgenética, son falsas creencias alimentadas desde el punto de vista de "calvicie = enfermedad". Nada más lejos de la realidad, como ya se comentó en el post "No cuentes pelos" , el AGA es una característica genética que se expresa en edad adulta (como las muelas del juicio o la finalización del proceso de crecimiento óseo) en personas que así lo han heredado.
Éstos son algunos de los mitos que se dice que provocan alopecia:
- Sexo y masturbación: Aunque este viejo cuento basado en tabús éticos y morales parece superado en nuestra época, todavía existen personas que lo siguen creyendo. Existen incluso teorías pseudo-científicas de elaboración casera. La verdad es que ningún estudio del mundo ha demostrado que la masturbación o el sexo influyan lo más mínimo en la aparición o avance de la alopecia androgénica.
- Fumar : Se trata de un hábito perjudicial para todo el organismo, provoca daños en la piel y en el cabello, pero no genera alopecia androgenética. Aunque un estudio taiwanés relacionó este vicio con la aparición temprana en personas predispuestas, habría que hacer más estudios.
- Deporte, musculación: Cualquier ejercicio, sobre todo el aeróbico de intensidad moderada, es beneficioso y nunca podría dañar nuestro cabello. Las puntuales fluctuaciones hormonales que provoca no influyen en un proceso a largo plazo como es el AGA. Sin embargo suplementarse con hormonas (esteroides) sí puede inclinar la balanza y acelerar la alopecia en personas predispuestas genéticamente (individuos que han heredado el gen de la calvicie).
- Lavado de pelo: Es curioso que este mito también está muy extendido, sobre todo entre las mujeres. Aunque la frecuencia de lavado y productos utilizados sí pueden influir en la fragilidad, aspecto y brillo del cabello, no debemos confundirnos. La alopecia androgenética se desencadena en lo más profundo de la raíz del cabello y se desarrolla al márgen de lo que ocurra en el exterior.
- Dieta, carne, grasas: Se trata de otro "falso culpable" al que se acusa frecuentemente. Ya tratamos en el post "El papel de la alimentación" sobre la importancia de ésta en todos los aspectos de nuestra vida, pero respecto al AGA, el control alimenticio se muestra casi irrelevante. Si bien es cierto que ciertos déficits alimenticios pueden reflejarse en el pelo o hacer la alopecia más evidente.
Y es que los mitos existen desde que existe el boca a boca. No podemos evitar creernos alguno, incluso habría que reconocer que muchos tienen una base real. Pero por alguna razón en lo respectivo a la alopecia la ciencia ha demostrado que estos mitos sólo se basan en supersticiones, creencias o como mucho en aspectos cosméticos puntuales.
